Android posee la mala fama de ser uno de los sistemas operativos que más agresiones recibe, ya que está en el 80% de los teléfonos inteligentes a nivel mundial. La realidad de que reciba ataques y haya debilidades que se expriman no pretende decir que no pueda ser transformado en el sistema operativo más seguro.
Android, debido a que es open-source, logra ser ajustado a placer y adecuado a esa necesidad de cualquier desarrollador. Asimismo, ser open-source deja que cualquier fallo del sistema logre ser cómodamente hallado y subsanado por las personas. Los teléfonos más seguros del mundo manejan todos Android, en sus diferentes versiones. Eso es gracias a las enormes posibilidades de caracterización que poseen esos terminales. Elaborar un sistema desde cero es muy complejo, y, sobre todo, caro. Android está muy rodado y, al ser personalizable, se logran borrar las partes que puedan originar más inseguridad. Conjuntamente de la propia seguridad de manejar el código open-source de Android, las compañías pagan considerables sumas a esos que hallan los fallos en sus móviles, ya sea a nivel de software o de hardware.
Por ejemplo, una compañía berlinesa que hace teléfonos seguros, llamada GSMK, utiliza versiones abreviadas de Android que no poseen algunas ocupaciones comunes en los teléfonos inteligentes, como los MMS y el Bluetooth, asimismo de desechar de ciertos codecs de vídeo. Cuantas menos librerías, mínima será la contingencia de que haya debilidades. Esos teléfonos, al ser más seguros, son asimismo más caros. Un CryptoPhone de GSMK cuesta 2.450 euros. Esa marca vende móviles a gobiernos y ejércitos en el mundo.
Otro móvil de la compañía Silent Circle, el Blackphone, utiliza llamadas cifradas, y poseen un medidor de privacidad para estar al corriente de qué aplicación está creando tráfico. Asimismo, brindan que cada debilidad grave hallada es parcheada en menos de 72 horas desde su revelación.
Conjuntamente, diversos de esos teléfonos no poseen acceso a la Play Store, ya que ahí se hallan diversas aplicaciones que solicitan permisos de más. Pese de que en las últimas versiones de Android solicitan permisos para ocupaciones claves del teléfono, inclusive luego de instalarlas como pudiese ser la entrada a la cámara, al micrófono, o a vuestra identidad, hay aplicaciones que van un paso más allá. ¿Para qué se pudiese anhelar una aplicación de la linterna y entrar a vuestra lista de contactos?
Un móvil de 2.450 euros se ve caro para una persona promedia, pero lograría no serlo para uno que puede ser objeto de ser espiado, como el administrador de un banco que mueve millones de dólares en una llamada, o un presidente que da órdenes militares, que, de hacerse públicas, lograrían colocar en riesgo la seguridad del país. Los móviles que se utilizan usualmente son muy vulnerables, ya que aplicaciones como Facebook logran entrar a vuestro micrófono a placer.
